Época de procesionarias
Llega la primavera y con ella la oruga procesionaria. La oruga procesionaria del pino es una mariposa nocturna, están muy extendidas hasta el punto de que son una plaga en muchos bosques de pinares de España, concretamente en la zona mediterránea, lo que obliga a tener mucho cuidado cuando pasees a tu perro por estas zonas. En esta época del año en la que apetece más salir a dar un largo paseo con nuestros peludos por el parque debemos tener especial cuidado con estas orugas ya que suponen un serio peligro para nuestras mascotas.
Esta oruga posee unos “pelillos” en su cuerpo llamados urticantes que, en caso de entrar en contacto con las mucosas o con los ojos de nuestros animales pueden ocasionar grandes lesiones. Además, si el insecto se siente en peligro, puede lanzar dichos pelos hasta unos 200 metros de distancia. Además, el efecto de la toxina que contienen puede mantenerse hasta durante un año
Los síntomas suelen ser picores, urticarias y sensación de quemazón, además de un babeo persistente. También pueden aparecer vómitos, hipertemia, necrosis, shock anafiláctico…
¿Qué hacer si mi perro ha tenido contacto con la oruga?
Si tu mascota ha entrado en contacto con la procesionaria lo primero que debes hacer es protegerte la piel y lavar rápido la zona afectada con agua tibia sin frotar y acudir inmediatamente con urgencia al veterinario más cercano.
